El asesinato del jefe político de Hamas, Ismail Haniyeh, en una visita oficial en Teherán despertó la furia del régimen iraní y del grupo terrorista palestino. El nuevo presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, prometió hacer que Israel “se arrepienta” del asesinato, mientras que el líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei, prometió un “duro castigo”.
Haniyeh era uno de los principales jefes del movimiento yihadista y desde hace más de una década digitaba los movimientos del grupo en Gaza. Según informaron miembros del grupo terrorista y del gobierno de Irán, el dirigente fue asesinado por un ataque aéreo en la capital poco después de que asistiera a la investidura del nuevo presidente en Teherán, Masoud Pezeshkian, junto con otros funcionarios de Hamas, de Hezbollah y de otros grupos aliados. Todos ellos acusaron a Israel de ser el responsable, a pesar de que no ha reconocido su autoría.
“Irán está de luto por el martirio del valiente líder de la Resistencia palestina Ismail Haniyeh”, escribió Pezeshkian en su cuenta oficial en X. “Ayer levanté su mano victoriosa y hoy tengo que llevar su ataúd sobre mis hombros. La República Islámica defenderá su integridad territorial y su honor y hará que los ocupantes terroristas lamenten su cobarde acción”, amenazó el presidente iraní.
El ayatolá Ali Khmenei, que había recibido a Haniyeh ayer mismo, declaró que “con esta acción, el régimen sionista criminal y terrorista preparó el terreno para imponerse un duro castigo, y consideramos nuestro deber vengar su sangre, ya que fue martirizado en el territorio de la República Islámica de Irán”.
“El martirio de Haniyeh en Teherán reforzará el vínculo profundo e inquebrantable entre Teherán, Palestina y la resistencia”, señaló en un comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores iraní.
Por su parte, Hamas dijo que Haniyeh murió en un “ataque sionista” y prometió que “no quedará sin respuesta”. Las brigadas Izz ad-Din al-Qassam, brazo militar de Hamas, dijeron que el asesinato era un “acontecimiento crítico” que lleva la batalla con Israel a “nuevos niveles” y tendrá “repercusiones importantes en toda la región“.
“Este es un punto de inflexión para el conflicto”, declaró Taher al-Nounou, asesor de prensa de Haniyeh, a la cadena de televisión Al-Jazeera, añadiendo que Israel y “quienes están a su lado, y con esto nos referimos a Estados Unidos”, serán los responsables.
Por otro lado, el grupo terrorista libanés Hezbollah, respaldado por Irán, también condenó a Israel. “El martirio del líder Haniyeh aumentará la determinación y obstinación de los combatientes de la resistencia muyahidín en todos los frentes y hará que su determinación sea más fuerte a la hora de enfrentarse al enemigo sionista”, afirmó Hezbollah en un comunicado.
No fueron las únicas reacciones al incidente. El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, dijo que el asesinato de Haniyeh era un “acto cobarde” e instó a los palestinos a permanecer unidos contra Israel. Las facciones palestinas convocaron una huelga general en Cisjordania por la muerte del jefe político de Hamas.
El vicesecretario general del grupo terrorista palestino Jihad Islámica Palestina, Muhammad Al-Handi, dijo que la muerte de Haniyeh era una gran pérdida para la nación, pero advirtió que “si el enemigo piensa que puede derrotar a la resistencia asesinando a sus líderes, está completamente equivocado”. “Hamas es un gran movimiento y llenará el espacio vacío, y Haniyeh buscaba el martirio desde su infancia», declaró Al-Handi según la agencia de noticias iraní Shehab.
Además, Mohammed Ali Al-Houthi, jefe del Comité Supremo Revolucionario de los hutíes de Yemen, otro socio de Irán y sus proxies, dijo en un comunicado que “atacar a Ismail Haniyeh es un atroz crimen terrorista y una flagrante violación de las leyes y los valores”.
Hasta el momento, Israel no ha hecho comentarios sobre el incidente ni ha reconocido su autoría. El portavoz oficial del gobierno de Netanyahu dijo que no harán comentarios sobre el asesinato. Tampoco han habido comentarios de la Casa Blanca.