La Corte Internacional de Justicia de La Haya ordenó a Israel que detuviera su operación en Rafah, en un golpe a los sistemas diplomático y judicial de Jerusalén. El máximo tribunal de la ONU también ordenó a Israel que permitiera la entrada en Gaza de toda la ayuda humanitaria necesaria.
Todas las medidas fueron acordadas en una votación por 13 votos a favor y 2 en contra. Los dos votos en contra de cada medida fueron los de Julia Sebutinde, representante de Uganda, y Aharon Barak, expresidente del Tribunal Supremo israelí y miembro designado por Israel para formar parte del panel de la CIJ.
La Corte votó que Israel debe “detener inmediatamente su ofensiva militar y cualquier otra acción en la zona de Rafah que pueda infligir daños a la población palestina de Gaza, o las condiciones de vida que provoquen su disfunción física, total o parcialmente a favor”. El tribunal también subrayó que Israel debe garantizar que el paso fronterizo de Rafah de Egipto a Gaza permanezca abierto a “escala de los servicios básicos y la asistencia humanitaria que se necesitan urgentemente”.
Asimismo, el Tribunal dijo que Israel debe “garantizar el acceso sin trabas a la Franja de Gaza de cualquier comisión de investigación y otros órganos competentes de las Naciones Unidas que hayan encomendado la investigación de denuncias de genocidio”. Según indicó el juez Nawaf Salam, presidente del Tribunal, Israel debe presentar en el plazo de un mes un informe en el que muestre su cumplimiento de estas órdenes.
La oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu mantenía consultas telefónicas con los ministros del gabinete sobre la decisión de la CIJ. En la reunión estarán el ministro de Asuntos Exteriores, Israel Katz, el ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, el ministro de Justicia, Yariv Levin, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, el asesor de Seguridad Nacional, Tzachi Hanegbi, y la fiscal general, Gali Baharav-Miara, junto con otros altos funcionarios.
Mientras tanto, Hamas celebró el fallo que ordenó el cese de la operación militar en Rafah. Sin embargo, el grupo terrorista dijo que la medida es insuficiente, dado que se refiere sólo a Rafah y no al resto del enclave.
Salam señaló que la situación humanitaria en Gaza, especialmente en Rafah, se ha deteriorado gravemente en los últimos dos meses, a pesar de las repetidas advertencias de distintos organismos de la ONU, incluso en relación con los hospitales de la zona. El juez afirmó que “no le convencen los esfuerzos de evacuación de Israel” Que “no ha abordado suficientemente estos riesgos”.
Israel ha rechazado en repetidas ocasiones las acusaciones de genocidio, alegando ante el tribunal que sus operaciones en Gaza son en defensa propia y están dirigidas contra los militantes de Hamas que atacaron Israel el 7 de octubre.
La CIJ emite sus órdenes a raíz de una solicitud presentada por Sudáfrica hace unos diez días para que se adoptaran medidas provisionales que ordenaran a Israel detener todas sus operaciones militares en la Franja de Gaza.