El Departamento del Tesoro de los Estados Unidos informó que impuso sanciones a seis altos mandos de Hamas, en una nueva medida contra el grupo terrorista palestino mientras Washington sigue intentando lograr un acuerdo de cese del fuego en Gaza y la liberación de los rehenes. En un comunicado, el organismo señaló que las sanciones se dirigían a los representantes del grupo terrorista en el extranjero, a un alto cargo de su ala militar, las Brigadas Izz Al-Din Al-Qassam, y a los implicados en el apoyo a los esfuerzos de recaudación de fondos y el contrabando de armas a la Franja.
“Hamas sigue contando con funcionarios clave que aparentemente desempeñan funciones legítimas y de cara al público dentro del grupo, pero que facilitan sus actividades terroristas, representan sus intereses en el extranjero y coordinan la transferencia de dinero y bienes a Gaza“, declaró en el comunicado Bradley Smith, subsecretario en funciones del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera. “El Tesoro mantiene su compromiso de desbaratar los esfuerzos de Hamas por obtener ingresos adicionales y exigir responsabilidades a quienes facilitan las actividades terroristas del grupo”, agregó el funcionario.
Entre las personas sancionadas se encuentra Abd al-Rahman Ismail abd al-Rahman Ghanimat, antiguo miembro del ala militar de Hamas que ahora reside en Turquía, según el Tesoro. Se lo acusa de estar implicado en “múltiples intentos de atentados terroristas y ataques exitosos”, incluido el atentado del Café Apropo en Tel Aviv en 1997.
Ghanimat había sido condenado anteriormente a cinco cadenas perpetuas, pero fue uno de los 1027 presos palestinos liberados en 2011 a cambio de Gilad Shalit, un soldado israelí secuestrado en ese momento por Hamas en la Franja de Gaza.
El Tesoro sancionó también a dos funcionarios de Hamas con sede en Turquía. Se trata de Musa Daud Muhammad Akari y Salama Mari, a quienes se atribuye haber participado en la facilitación de la transferencia de fondos desde Turquía a Gaza y Cisjordania para Hamas.
Akari fue condenado anteriormente por Israel por participar en el asesinato en 1992 del policía israelí Nissim Toledano y también fue excarcelado como parte del acuerdo sobre Shalit en 2011.
Estados Unidos advirtió el lunes a Ankara para que no reciba ni de asilo a dirigentes de Hamas tras conocerse que altos cargos del grupo terrorista se habían trasladado allí desde Qatar, que les pidió que abandonaran su territorio por negarse a acordar una tregua.
Además de los tres funcionarios de Hamas con sede en Turquía, el Departamento del Tesoro estadounidense comunicó que imponía sanciones a los funcionarios Basem Naim y Ghazi Hamad, que residen en Gaza. Según el organismo estadounidense, Naim “ha participado en los contactos de Hamas con Rusia y ha formado parte de delegaciones en otros países”, mientras que Hamad “ha sido editor de medios de propaganda de Hamas y está autorizado a hablar públicamente en nombre del grupo terrorista”.
Hamad también estuvo implicado en el pasado en la supervisión de los pasos fronterizos de Gaza, que según el Tesoro eran “una de las principales vías por las que Hamas introducía armas de contrabando en Gaza”, y también eran utilizados por el grupo para introducir de contrabando el material que utilizaba para construir su extensa red de túneles entre la población civil palestina.
El último funcionario de Hamas incluido en la lista de sanciones del martes fue Mohammed Nazzal, de quien el Tesoro dijo que “ha prestado apoyo al grupo terrorista durante más de 30 años”. Nazzal, que ha vivido anteriormente en Jordania y Siria, es un alto dirigente del Consejo de Relaciones Internacionales de Hamas, según el Tesoro.
Las sanciones congelan todos los activos estadounidenses que sean propiedad o estén bajo el control de las personas mencionadas. También bloquean las transacciones financieras con las personas designadas y prohíben la aportación de fondos, bienes y servicios a las mismas.
La acción del martes supuso la novena vez que el Tesoro impone sanciones a entidades y patrocinadores de Hamas desde el brutal ataque terrorista del 7 de octubre de 2023. Al cumplirse un año del atentado, el Tesoro impuso sanciones a una “organización benéfica ficticia” en Italia que, según dijo, había estado recaudando fondos para el grupo terrorista palestino, y a dos altos representantes de Hamas en Alemania y en Austria.