El ministro de Asuntos Exteriores, Gideon Sa’ar, anuncia que cerrará la embajada de Israel en Irlanda, alegando la “extrema política antiisraelí del gobierno irlandés”.
Israel retiró a su embajador en mayo después de que Irlanda se convirtiera en uno de los tres países de la UE que dijeron que reconocerían unilateralmente un Estado palestino. Irlanda no ha retirado a su enviado en Israel.
La semana pasada, el gabinete de Irlanda votó a favor de unirse al caso de Sudáfrica que acusa a Israel de “genocidio” en el Tribunal Penal Internacional de La Haya.
“Las acciones y la retórica antisemitas que Irlanda está llevando a cabo contra Israel se basan en la deslegitimación y demonización del Estado judío y en el doble rasero”, afirma Sa’ar en un comunicado. “Irlanda ha cruzado todas las líneas rojas en su relación con Israel. Israel invertirá sus recursos en promover las relaciones bilaterales con los países del mundo de acuerdo con las prioridades que se derivan también de la actitud de los distintos países hacia él.”
Al mismo tiempo, Sa’ar anuncia que Israel abrirá una embajada en Moldavia, que ya tiene una embajada en Israel. Se espera que la apertura se produzca el año que viene, e Israel está iniciando el proceso de búsqueda de una sede y nombramiento de un embajador.
“Hay países que están interesados en estrechar sus lazos con Israel y aún no tienen embajada israelí”, dice Sa’ar. “Ajustaremos la estructura diplomática israelí de nuestras misiones teniendo en cuenta, entre otras cosas, el enfoque y las acciones de los distintos países hacia Israel en el ámbito político”.