El Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que su país continuará su ofensiva contra Hamas a pesar de la posible falta de apoyo estadounidense. Este pronunciamiento se produce después de que Biden expresara su preocupación por el uso de armas estadounidenses en ataques que han resultado en la muerte de civiles en Gaza durante una entrevista con CNN.
La administración Biden ha sido explícita en su oposición a una operación militar en Rafah, la ciudad sureña del enclave de Gaza, argumentando que desencadenaría una crisis humanitaria significativa.
Según declaraciones emitidas por John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca y difundidas por CNN, Estados Unidos mantendrá el envío de material defensivo, como el utilizado en el sistema antimisiles Cúpula de Hierro, pero retirará su apoyo con armamento ofensivo como artillería y bombas para cazas si Israel decide avanzar.
Kirby también señaló que cualquier acción militar en Rafah podría ser contraproducente para Israel, beneficiando a Hamas en las negociaciones en curso en Egipto para la liberación de rehenes.
A pesar de las pausas en las conversaciones para un nuevo pacto entre Israel y Hamas, Estados Unidos se muestra optimista. Las delegaciones han regresado a sus países, incluyendo al director de la CIA, Will Burns, pero siguen comprometidos con la esperanza de alcanzar un acuerdo, según informaciones publicadas por EFE.
Por otro lado, Netanyahu recordó el espíritu de lucha que acompañó la creación del estado de Israel en 1948, prometiendo continuar la lucha contra Hamas con o sin el apoyo de Estados Unidos.
En el frente de batalla, Israel ha intensificado sus operaciones en el este de Rafah, logrando neutralizar a aproximadamente 50 terroristas y destruir cerca de 10 túneles estratégicos para las operaciones enemigas. También se ha asegurado el control del cruce de Rafah con Egipto, previniendo el ingreso de armas al enclave.