El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel ha enviado una carta al jefe de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA), Philippe Lazzarini, denunciando que 100 empleados de la agencia son presuntos terroristas de Hamas. Esta revelación, divulgada inicialmente por el diario alemán Bild, ha provocado una ola de preocupación y debate sobre la seguridad y la neutralidad de la UNRWA.
La carta enviada a Lazzarini contiene nombres, números de pasaporte y números de identificación militar de 108 empleados de la UNRWA que supuestamente también son operativos de Hamas. Este listado forma parte de una “lista más amplia” de trabajadores de la ONU vinculados a grupos terroristas como Hamas y Jihad Islámica Palestina (PIJ), que no se ha hecho pública por razones de confidencialidad.
La acusación de Israel se basa en información obtenida después del ataque del 7 de octubre, en el que, según las autoridades israelíes, participaron activamente empleados de la UNRWA.
Infiltración de grupos terroristas en la UNRWA
El alcance de esta infiltración se volvió evidente tras el ataque del 7 de octubre en Israel. Según recuerda la carta, la participación de empleados de la UNRWA en actos de terrorismo viola el principio de neutralidad de la agencia. La misiva también menciona que Israel ha descubierto recientemente que cientos de terroristas, incluidos altos cargos de Hamas y PIJ, están empleados por la UNRWA en la Franja de Gaza.
Israel ha exigido a la UNRWA que despida de inmediato a todos los empleados identificados como miembros de Hamas o PIJ y exige a la agencia de la ONU que tome medidas inmediatas para eliminar la amenaza que representan estos empleados para la seguridad de Israel y la integridad de la agencia.
La lista con los nombres e identificaciones de los presuntos terroristas también será proporcionada a los principales donantes de la UNRWA.
En respuesta a las acusaciones, Philippe Lazzarini ha declarado que la agencia ha despedido a los empleados involucrados en los ataques del 7 de octubre y ha iniciado investigaciones para establecer la verdad.
Las acusaciones han suscitado interrogantes sobre el futuro de la financiación de la UNRWA, especialmente por parte de Alemania, uno de sus principales donantes. La presencia de terroristas en la UNRWA plantea dudas sobre la neutralidad de la agencia y la seguridad de su personal, lo que podría llevar a una revisión de los fondos destinados a la organización.
La carta del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel no solo busca acciones inmediatas contra los empleados implicados, sino que también arroja luz sobre la necesidad de una mayor supervisión y transparencia en las operaciones de la agencia.