El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, sostuvo este jueves que “el primer paso para detener los intentos de Irán de apoderarse de Oriente, incluida Arabia Saudita, es destruir Hamas“. El mandatario insistió así con el objetivo militar de erradicar definitivamente al grupo terrorista que controla la Franja de Gaza, y siembra nuevamente dudas sobre la aceptación de Israel al acuerdo de cese del fuego propuesto por los Estados Unidos, que implica una retirada total de las tropas israelíes del enclave.
“El primer requisito es cortar esa mano, Hamas”, dice Netanyahu a una delegación visitante de exoficiales de bandera y expertos estadounidenses del Instituto Judío para la Seguridad Nacional de América. “La gente que nos hizo esto no va a seguir estando ahí. Tendremos una larga batalla, no creo que tan larga, pero nos desharemos de ellos”, aseguró el premier israelí.
Además, Netanyahu dijo que Israel también debe “disuadir a los otros elementos del eje terrorista de Irán”. El mandatario sostuvo que la alianza respaldada por Irán “está en marcha para conquistar Medio Oriente, incluyendo Arabia Saudita y toda la península arábiga”. “Es sólo cuestión de tiempo”, advirtió.
Netanyahu enfrenta una ola de críticas por la falta de avances en las negociaciones para la devolución de los secuestrados -tanto vivos como muertos- a Israel. En los últimos meses, se han hecho cada vez más frecuentes las protestas encabezadas por los familiares de los rehenes, que denuncian un abandono por parte del Gobierno israelí.
El primer ministro está en la mira de la sociedad, y se especula con que, una vez pasada la guerra, sea destituido de su cargo. Una muestra de la pérdida de poder de Netanyahu fue el fallo histórico del Supremo Tribunal de Israel este martes en el que ordenó al Gobierno alistar al ejército a los jóvenes ultraortodoxos, una medida que va contra la base de sustento del Likud, partido al que pertenece el mandatario.