El ejército israelí confirmó la muerte de dos rehenes cautivos de Hamas, tras obtener nueva información de inteligencia. Se cree que Alex Dancyg, de 75 años, y Yagev Buchshtav, de 35, estaban retenidos juntos por Hamas en Khan Yunis y murieron hace varios meses, mientras las FDI operaban allí. Sus cuerpos siguen en Gaza.
El ejército no detalló las circunstancias de sus muertes, citando una investigación en curso.
Dancyg y Buchshtav fueron secuestrados por terroristas de Hamas en sus casas del kibutz Nir Oz y el kibutz Nirim durante el ataque del 7 de octubre.
Sus muertes fueron declaradas por un grupo de expertos sanitarios y miembros del rabinato, a raíz de la nueva información obtenida de las Fuerzas de Defensa de Israel.
Con esta información actualizada, hasta ahora las FDI confirmaron la muerte de 44 de los 120 rehenes restantes retenidos por Hamas desde el 7 de octubre. El grupo terrorista secuestró a 251 personas durante la embestida.
Hamas afirmó en marzo que Buchshtav había muerto por falta de alimentos y medicamentos, y Dancyg por fuego israelí. Las FDI no han confirmado estas afirmaciones.
La esposa de Buchshtav, Rimon Kirsht Buchshtav, fue secuestrada con él y liberada el 28 de noviembre en un acuerdo con Hamas sobre el secuestro.
Los kubutzim de donde se llevaron a Alex Dancyg y Yagev Buchshtav fueron dos de los más golpeados por la masacre terrorista.
En el ataque sorpresa contra Israel que se produjo el 7 de octubre de 2023, terroristas palestinos de la Franja de Gaza invadieron Nir Oz y asesinaron a decenas de sus residentes, quemaron casas y secuestraron a civiles. Según el periódico The New York Times, 180 de los aproximadamente 400 residentes del kibutz fueron asesinados o secuestrados como rehenes. Entre ellos, la familia argentina isarelí compuesta por Shiri, Yarden, Ariel y el bebé Kfir Bibas.
En el kibutz de Nirim, al sur de Israel, unos 20 terroristas armados con fusiles, granadas y lanzacohetes se enfrentaron con los residentes en un intercambio de disparos sin precedentes. Los propios habitantes del kibutz lograron contener a los milicianos en un puesto de control hasta que llegaron los refuerzos del Ejército israelí.